

La situación se agravó tras la decisión unilateral del PAMI de trasladar más de 10 mil cápitas al sector privado, lo que desató un masivo reclamo por parte de los afiliados. El propio intendente mantuvo una reunión con autoridades de la obra social para solicitar que se revierta la medida.
Mientras tanto, la incertidumbre y la angustia crecen entre los jubilados, que sienten que la entidad los deja sin respuestas claras.
Por otra parte, representantes locales de La Libertad Avanza —fuerza política que conduce el gobierno nacional— no han realizado gestiones al respecto. Referentes como Mariano Valeante y Juan Cerezuela mantienen silencio frente al conflicto.