

Se fue uno de esos tipos que dejan huella: el querido “Gordo” Raúl Ugarte partió físicamente en las últimas horas y con él se fue un pedazo importante de la historia del fútbol local, habiendo sido protagonista de la hora más gloriosa en las décadas del ’70 y ’80 con los juveniles y el heroico Estación Quequén.
Apasionado del buen fútbol, bonachón, piola, querible y fanático de River hasta la médula, Ugarte fue uno de los grandes detectores de talentos y formadores de futbolistas en la ciudad, que con su jeep de un lado a otro de la ciudad y su ojo clínico contribuyó a que se formara una de las generaciones más exitosas (sino la más) del fútbol de la Liga Necochea, con los títulos de los juveniles en la década del ’80 y el heroico ascenso de Estación Quequén al Nacional B en 1988.
Si bien al Verdiblanco lo dirigía Oreste Quito Ortiz, el Gordo Ugarte tuvo una cuota preponderante en la formación de varios de aquellos jugadores, quizá el más emblemático, el “goleador eterno” Luis Eduardo “Paquillo Sánchez”, quien lo adoraba como a un padre a Ugarte. Fue precisamente él quien llevó a Estación Quequén hacia su último título en el fútbol local, allá por 1990.
Hace pocos años años, el “Gordo” ya estaba retirado hace rato de las canchas y dedicado de lleno a la vida con su esposa Alicia, con sus hijas Magalí y Melisa ya habiendo tomado vuelo propio en la vida, y él firme en su negocio de la calle 66, adonde éste periodista solía ir a visitarlo y charlar pese a la diferencia de edad, me dejó una frase que nunca olvidaré: “Hablamos tanto de fútbol que me dieron ganas de volver a dirigir…, tengo algo en vista”, me dijo Raúl, lo que hablaba de la pasión de un tipo que respiraba fútbol 24/7.
Nunca supe qué era lo que tenía en vista Ugarte, y no pudo volver a ser en esta vida, pero seguramente ya se estará armando un equipo allá arriba, elegido por su buen ojo y con estirpe ganadora. Hasta siempre “Gordo”.
Premio entregado por el Círculo y “Paquillo” en 2019
El gran formador de futbolistas, había recibido la distinción especial de Gloria Deportiva 2019 por parte del Círculo de Periodistas Deportivos de Necochea, y la entrega aquella noche en Del Valle había sido de manos de uno de sus hijos futbolísticos: Luis Eduardo “Paquillo” Sánchez.