Rojas explicó que el municipio estaba “a un paso” de ejecutar los títulos de deuda y avanzar con los embargos correspondientes, lo que le habría permitido al distrito cobrar de inmediato los montos adeudados y abrir una etapa de renegociación. “Esos fondos iban a ser volcados a la reparación de las calles de tierra y asfalto de Necochea y Quequén, especialmente en los sectores donde circula la mayor parte de la producción”, señaló.

El intendente reveló que el municipio tiene elaborado un plan de pavimentación para más de 30 cuadras de Quequén, aunque optó por no anunciarlo hasta tanto exista la certeza de contar con los recursos afectados provenientes de la tasa. “Lamentablemente, con la medida cautelar a favor de las terminales portuarias, los vecinos siguen subsidiando a uno de los sectores más poderosos de Argentina, que además es el que mayor daño produce en nuestras calles con la enorme circulación de camiones hacia el puerto y los acopios”, afirmó.

Rojas también cuestionó los fundamentos del fallo del juez Dr. Herrera, recordando que en agosto el mismo magistrado había rechazado una cautelar con argumentos opuestos. “Cuando uno mira los fallos, en agosto decía una cosa y unos meses después aparece algo que parece escrito por otra persona. Es llamativo, raro, y claramente va en contra de los intereses de los vecinos de Quequén y a favor de las terminales”, planteó el intendente.

Indicó que el municipio seguirá los caminos legales correspondientes. “Haremos todo lo que tenemos que hacer, vamos a apelar para cobrar lo que es justo para los vecinos”, aseguró.

El jefe comunal advirtió que, sin los recursos de la tasa, el municipio podría llegar a un punto crítico en el mantenimiento vial. “Va a llegar un momento en que ya no vamos a poder hacer el repaso y las calles quedarán directamente anuladas para el paso de la producción”, alertó.

Además, desmintió versiones que apuntan a que los fondos de la tasa irían a rentas generales. “No es así. La ordenanza está planteada con recursos afectados, exclusivamente destinados a reparar el daño que genera el tránsito pesado”, aclaró.

Rojas insistió en que espera que finalmente pueda encontrarse una solución a través del diálogo, pero remarcó que el municipio no dejará de reclamar lo que considera legítimo para garantizar el mantenimiento de las calles y la calidad de vida de los vecinos.