A dos meses de que el mundo conociera la Music Sessions #53 de Bizarrap junto a Shakira, un tema que marcó récords desde que se estrenó en todas las plataformas digitales, el productor sorprendió ahora con un feat con Arcángel, que había anunciado a través de sus redes sociales el pasado 21 de marzo.

En el inicio de la BZRP número 54, el portorriqueño hace referencia a sus palabras de hace un año, cuando expresó que de grabar una canción con el argentino ocurriría lo mismo que con todos sus ritmos anteriores: "Yo soy un tipo que asesino los ritmos, esa es mi destreza, yo hago eso, aunque no diga nada. Aunque diga 'ajá' o un 'Hey ya' suena cabrón en el ritmo y no es rapeado", mencionó.

En el estudio de Bizarrap, el primer verso del reguetonero hace referencia al hecho de que por fin se le dio grabar una canción junto a Bizarrap y comenzó a lanzar las que serían pullas para algunos de sus colegas que han querido ver derrumbada su carrera, pero no han podido.

"Activo en la música, también la calle, mi reputación no se mancha. Como un alpinista, disfruto la vista sin miedo a ninguna avalancha. Este flow legendario no tiene adversario, como Maradona en la cancha. Los maté y quieren que yo le baje. Quieren verme, hacerme fracasar, llevan años tratando, pero eso no va a pasar", dice uno de los versos rapeados de Austin Agustín Santos.

En otro de los versos que entregó el reguetonero hizo una comparación en lo que respecta a su carrera cuando dice "descansé un par de año', volví y me pegué, matándolo' como Shakira y Piqué. Yo no juego al fútbol, pero los Peleé (...) Yo sé que les duele, subí de nivele', ahora tengo propiedade', entro y parecen hoteles”, haciendo referencia a los logros y lujos que ha conseguido con su trabajo en la música.

Con la colaboración, el argentino logra consolidar su nombre en la industria musical internacional con este nuevo artista que se suma a su larga lista de sesiones, donde cada participante habla sobre diferentes temas, según su percepción personal. En el caso de Arcángel recordó que no tuvo una infancia fácil y viene de un barrio en el que quizás vivió momentos duros antes de conseguir la fama.

"Cabrón, yo vengo del barrio, difícil fue mi viaje. Ahora tengo giras donde no entienden mi lenguaje. C’est la vie, fui a París y aprendí a hablar francés. Estos traperos son mis hijos, fui parte de su niñez", dice en el estribillo el portorriqueño.