El puente Dardo Rocha, uno de los tres que unen las ciudades de Necochea y Quequén, es una bomba a punto de detonar. A su estado calamitoso solo le falta agregarse un accidente de magnitud para que todo estalle por los aires. Y al Estado provincial parece no hacerle mella.

En el aire del programa radial Voces de la Ciudad, el titular de Vialidad Zona XII, Carlos Etcheverry, volvió a excusarse sobre la fallida licitación para el arreglo de los corredores peatonales y otros trabajos menores que ni siquiera comprenden el arreglo de la calzada principal.

El tercer llamado público para adjudicar esa obra al privado volvió a caerse, y es que con el proceso inflacionario que vive el país un mismo presupuesto alcanza cada vez para menos. Esta vez, la Comisión de Preadjudicación de Vialidad de la Provincia de Buenos Aires resolvió rechazar la propuesta del único oferente que se presentó para este empresa.

Foto: Osmar Cioti

Las primeras dos licitaciones desiertas contemplaban el arreglo total del paso, mientras que en este tercer periodo se buscó dar prioridad, por lo acotado de los fondos destinados a tal fin, a reparar la parte metálica del mismo, pero tampoco hubo luz verde para hacer la obra.

"Luego de presentarse una sola empresa para la reparación parcial del puente, todo lo que tiene que ver con sus artefactos metálicos, la comisión optó por desestimar la oferta por no ser conveniente a los intereses fijados", señaló el funcionario bonaerense.

A su vez, detalló que "el presupuesto oficial era de 360.196.487,77 millones de pesos, y la empresa cotizó 890.890.160,50, estando un 147,33% por encima del presupuesto oficial, pero después de unos días de estudios y conclusiones la comisión la desestimó, y esto nos pone en una situación compleja para la necesidad de reparar el puente".

En este último aspecto, el titular local de Vialidad argumentó que "la estructura metálica del puente cada día está en condiciones peores y en este momento estamos otra vez a foja cero y la semana que viene trataremos de coordinar algo con La Plata y ver qué determinación se toma para esta situación".

Ante esta marcada desidia -o desinterés- lo único que la falta a Provicia es pretender que el municipio también le arregle los puentes.