A dos días de la final de la Copa Libertadores 2023, que se llevará a cabo este sábado desde las 17 en el estadio Maracaná, la barra de Fluminense bajó en la tarde de este jueves a la playa de Copacabana para agredir a los hinchas de Boca presentes, incidentes que terminaron con una represión policial.

Los barras del Flu se dirigieron por la avenida principal de Copacabana y se lanzaron a atacar de manera organizada a los simpatizantes xeneizes que estaban en la arena, quienes se defendieron de las agresiones y los robos, denunciando una "zona liberada".

La policía llegó diez minutos más tarde de lo ocurrido para reprimir con balas de goma a pocos metros de la gente y gases lacrimógenos, pero el ataque de la hinchas brasileros se dio en un marco de cinco minutos y la gran mayoría escapó rápidamente. 

Según TyC Sports, los sobranada (la barra local) se filmó dirigiéndose a la emboscada a través de sus propias redes sociales y golpeando a los fanáticos boquenses presentes en la playa de Copacabana. El ataque terminó con varios hinchas de Boca y turistas heridos -algunos por parte de la parcialidad del Flu y otros por la represión policial-, y otros que sufrieron robos.

Incluso, se viralizó un video en las redes en el que se ve como la fuerza de seguridad se llevó detenido a un hincha argentino al que los brasileños que estaban alrededor le gritaban "racista". Al respecto, la cuenta oficial de la Policía Militar publicó: "Dos hinchas argentinos fueron detenidos esta tarde en la playa de Copacabana, luego de involucrarse es un distribuido en la franja de arena. Agentes policiales de #RECOM y #19VPM actuaron rápidamente y llevaron el incidente a constancia en la comisaría de la región".

El hincha detenido que salió el video se llama Cristián Medina, de Villa Celina. Estuvo en una comizaría de LeBlon junto al otro hincha que era de Bariloche y cerca de las 20 lo liberaron.

Conmebol pidió este viernes a las autoridad de seguridad de Río de Janeiro que incrementen la cantidad de efectivos por lo sucedido en Copacabana, aunque ayer por la noche simpatizantes de ambos equipos compartían con tranquilidad la playa.

Sin embargo, más tarde volvieron los disturbios al lugar, cuando intervino la policía con intenciones de desalojar la zona lanzando gases y balas de goma. Por ahora, por más que haya momentos de paz, parece imposible que no aparezcan chispazos que reaviven la bronca.