La Sala Cuarta del Tribunal de Casación Penal de la provincia de Buenos Aires acaba confirmó este viernes la pena a prisión perpetua para Carlos Javier San Román, quien había sido encontrado culpable por un jurado popular a mediados de este año por un brutal femicidio que conmocionó a la ciudad de Tres Arroyos. Fabiana Suita, de apenas 30 años, fue la víctima del crimen consumado el 14 de octubre de 2018.

El juez Christian Alberto Yesari, del Tribunal en lo Criminal Nº 1, le había impuesto la pena más alta prevista en el Código Penal, al imputarlo del delito de homicidio agravado por el vínculo y por ser cometido por un hombre a una mujer mediando violencia de género.

Sin objetar la autoría, la defensora oficial, Laura Pereyra, presentó un recurso de apelación ante Casación para cuestionar la imputabilidad del hombre, pero los jueces Mario Eduardo Kohan y Carlos Ángel Natiello, lo rechazaron por improcedente.

"Si bien la defensa esgrime que los peritos de Bahía Blanca y Azul concluyeron que su defendido podía comprender lo que está bien de lo que está mal, pero al momento del hecho no pudo dirigir sus acciones debido a que presentaba un retraso madurativo y una fuerte carga emocional de una discusión, lo cierto es que (...) los peritos médicos psiquiatras de la Asesoría Pericial de La Plata indicaron que el mismo podría llegar a tener un retraso mental leve, más que eso no y de ser así el mismo entiende lo que es un homicidio", sostuvo Casación. 

Y en cuanto a la fuerte carga emocional, ninguno de los testigos que ese día estaban en la casa dijeron haber escuchado una discusión entre ellos. "Además, del resto de la prueba producida ha quedado claro que el inculpado intentó reanudar su relación con la víctima, quien había decidido cortar el vínculo por los celos obsesivos", ampliaron los jueces platenses.

Testigos declararon que San Román "se había obsesionado con Fabiana" y que ella ya "no podía atender a proveedores o clientes hombres" y que era seguida adonde iba.

"A la luz de la prueba reseñada se puede determinar que cualquier ciudadano medio, aplicando las reglas de la lógica y el sentido común más elemental, bien pudo arribar a la conclusión validante de la hipótesis fiscal, lo que resulta suficiente como para homologar el temperamento adoptado por el jurado", afirmó Casación que, en consecuencia, confirmó la sanción de prisión perpetua contra San Román.