Zubillaga señaló que "el poder legítimo en la ciudad reside en la municipalidad, elegida por el pueblo, y no en la Usina ni en consorcios que se autodenominan centros de poder". En ese sentido, criticó la falta de respeto hacia los concejales y la comunidad de Necochea, dado que la Usina no ha cumplido con los términos del contrato de concesión que justifican esta extensión del vínculo.

El concejal enfatizó que la prórroga fue acordada entre la municipalidad y la cooperativa bajo la aprobación de los 20 concejales, quienes representando diversas posturas, dieron su visto bueno con la condición de cumplir ciertas obligaciones. Sin embargo, los problemas relacionados con el consumo eléctrico y la falta de claridad en la gestión de la Usina han generado nuevas complicaciones.

"El pueblo de Necochea no puede ser rehén de intereses particulares. Necesitamos una solución que represente a toda la comunidad y no a unos pocos", sentenció Zubillaga, al tiempo que hizo un llamado a buscar respuestas basadas en criterios técnicos profesionales y en el sentido común.

El edil también puso el foco en la falta de transparencia sobre la valuación de los inmuebles concedidos por la municipalidad. "Las propiedades fueron tasadas de manera unilateral, sin ningún criterio claro", denunció. Según Zubillaga, mientras el valor total de la cooperativa se estima en cerca de 100 millones de dólares, la valuación para los seguros es apenas de 10 millones, lo que levanta serias dudas sobre cómo se está gestionando la entidad.

En su intervención, Zubillaga subrayó la responsabilidad que tiene la municipalidad de proteger los intereses del pueblo de Necochea, recordando que la Usina Popular Cooperativa es una empresa de la economía social creada con el objetivo de prestar servicios económicos, sociales y culturales a sus asociados, y no para el beneficio de unos pocos.

La prórroga de la concesión ha generado un intenso debate en la comunidad. Algunos sectores destacan el papel fundamental que ha tenido la cooperativa en el desarrollo social y económico de la región. Sin embargo, Zubillaga y otros críticos sostienen que "la falta de transparencia y rendición de cuentas es inaceptable", lo que ha profundizado la desconfianza en la gestión de la cooperativa.

Finalmente, el concejal reiteró su llamado a una mayor transparencia tanto en la gestión de la Usina como en la valuación de los inmuebles que forman parte de esta concesión, recordando que el tema sigue siendo objeto de debate y análisis en Necochea.