En Tierra del Fuego, el Gobierno nacional anunciará el traslado a Ushuaia de la sede del Instituto Antártico, que hoy está en Villa Martelli, provincia Buenos Aires.
Se trata de tres laboratorios multimodales construidos conjuntamente entre las carteras de Defensa y Ciencia y Tecnología, y el Comando Conjunto Antártico (COCOANTAR) con una inversión de 260 millones de pesos, con el objetivo de intensificar las tareas de investigación científica en el continente antártico.
Además, en el marco del Programa CITEs, el Ministro de Ciencia, Daniel Filmus, transfiere a la Universidad Nacional de Tierra del Fuego la suma de 292.111.920 millones de pesos para el comienzo de la obra. El nuevo centro busca contribuir al fortalecimiento de la soberanía argentina, a través de la generación de conocimientos básicos y aplicados en temas estratégicos de la región antártica y subantártica.
Esta iniciativa es parte del Programa de Centros Interinstitucionales en Temas Estratégicos (CITEs) cuyo objetivo es promover la asociación multidisciplinaria de centros de investigación para la conformación de centros interinstitucionales y así complementar capacidades y recursos en torno a una problemática o tema estratégico.
Luego, lo más destacado: de poder concretarse el traslado desde la capital de Tierra del Fuego hasta el continente antártico, ya que todo dependerá de que las condiciones climáticas lo permitan, (el 25 de mayo de 2022 se tuvo que suspender un viaje de igual característica por la meteorología) Alberto Fernández será el cuarto presidente en la historia Argentina que va a visitar la Antártida, coincidiendo con el día nacional de la soberanía, que se celebra por la instalación en 1904 de la base Orcadas.
Los tres primeros mandatarios nacionales que visitaron el continanete blanco fueron Arturo Frondizi (8 de marzo de 1961), Isabel Martínez de Perón (10 de diciembre de 1974) y Carlos Saúl Menem (1997).
Es cierto también que a visita se producirá en el marco de una estrategia del Gobierno por mostrarse activo en la región antártica, luego de varias quejas ante la ONU por actividades militares de Gran Bretaña en la zona de las Islas Malvinas, pero también en la planificación de posicionar a Tierra del Fuego como puerta de entrada a la Antártida, como polo logístico científico internacional.