El llamado de emergencia lo emitió un vecino que recorría la Escollera Sur. En el sector donde habitualmente descansan, sobre la banquina de la desembocadura del Río Quequén, un pequeño lobo marino estaba atrapado por lo que se conoce como un "enmallamiento incidental".
Recibida la alerta, el ambientalista local Carlos Leo se cambió y rápidamente se dirigió a las coordenadas enviadas por el caminante para prestar sus servicios desinteresadamente, como tantas otras veces. "Luego de mis actividades laborales, raudamente me dirijo al lugar del hecho; preparo el equipo de rescate y las medidas de acepcia: barbijo, guantes, alcohol, etcétera", comenzó el relato en sus redes sociales.
Sobre la especie salvada, el ejemplar era un pequeño lobo marino sudamericano (Otaria flavescens), denominado en la jerga como lobo de "un pelo" y por los especialistas como otario de la Patagonia o león marino.
Leo continuó explicando que el ejemplar "portaba un zuncho que proviene de basura náutica; restos de una red artesanal utilizada para la pesca comercial", y calificó a la maniobra como "hermosa, pero difícil". Luego de 4 horas de trabajo para liberarlo, el ambientalista aseguró en su Facebook que el lobito era arisco ante las maniobras humanas y que "esto se produce porque regresan de la etapa de apareamiento, y les queda el instinto de la lucha entre pares para procurar su pareja".
"El chiquito estaba entreverado en la manada y muy cerca del agua, iba y venía... Hasta que se calmó. Fue el único momento en que me pude acercar, pero no todo es al dedillo, un lobito se antepuso a él y me lo tapó. No podia creer lo que estaba viendo... Imposible acercarse más por el hecho que lo podía perder y cuando esto sucede desaparecen por largo tiempo", prosiguió sobre su aventura el abogado necochense.
Fue entonces cuando supo que no podía fallar en el corte, "para que no me relacione como un enemigo". "Decidí apoyar el corta zuncho sobre el lomo del que lo antecedía, por suerte le rasque un poco el lomo y le encantó... Hasta que lo tuve a tiro. Prohibido fallar, ya que sería lapidario. Mucha concentración y silencio, fue un corte hermoso", sintetizó con respecto al momento de la liberación.
"El leoncito fue despojado de su pesada carga. Tengo una sensación de felicidad indescriptible. Otro hermoso animalito que ya no sufre. Muchas gracias por vuestra atención. Necochea-Quequen libre de enmallamiento incidental", terminó agradeciendo y solicitando concientización para no afectar la fauuna que nos rodea y que tan lindo y único hace a este distrito.