

Según un informe de la Bolsa de Comercio de Rosario (BCR), el impacto de la sequía sigue acumulando pérdidas para el campo, dado que en el inicio de la campaña de soja se proyectaban unas 19 millones de toneladas, pero hoy se estima una merma del 45%, casi la mitad de la producción.
Además, el informe de la Bolsa de Comercio rosarina indica que hay medio millón de hectáreas sin sembrar en el campo e informa de una caída importante en los futuros rendimientos debido a la sequía que azota la zona núcleo.
"Nadie se explica cómo en tres meses del cultivo sucedió esto. Si bien se sabía que sería una campaña muy difícil por la sequía, lo que se ve ha superado las peores pesadillas de los productores", dijeron los especialistas del campo.
En ese sentido, el informe, que se publicó en las últimas horas, presenta un horizonte productivo para la soja muy complejo, donde al inicio de la actual campaña se perfilaba una cosecha en la zona núcleo que era casi el doble de las actuales estimaciones.
Al respecto, en el inicio del ciclo, desde la entidad se proyectaba una producción total de soja de 19,7 millones de toneladas, sobre la base de un rendimiento promedio de 40 quintales por hectárea y una intención de siembra de 5,1 millones de hectáreas. Sin embargo, las actuales estimaciones son de una cosecha total de 10,7 millones de toneladas, con un rendimiento promedio de 23 quintales por hectárea y una baja en la superficie sembrada de casi medio millón de hectáreas.
Vale recordar que, esta semana, la bolsa rosarina publicó sus proyecciones a nivel nacional para la actual campaña gruesa, que según expresaron los especialistas se está desarrollando bajo las condiciones más secas de los últimos 60 años o más, y se estimó una cosecha nacional de soja de 37 millones de toneladas, un 13% menos que en la última campaña; y en relación al maíz se señaló que en un escenario normal podría alcanzar una recolección de 50 millones de toneladas, pero los cálculos actuales se ubican en 45 millones.
Los dirigentes de la Asociación Argentina de Productores Agropecuarios expresaron su preocupación por el impacto de la sequía y realizaron hace un par de días un fuerte reclamo a la clase política nacional para que asistan a los damnificados. En ese marco, lanzaron una advertencia: "Hagan algo. Queremos soluciones urgentes. Dejen las vacaciones. Pónganse los pantalones largos y salven al sector agropecuario, no van a quedar alimentos para la mesa de los argentinos".
Así se pronunciaron en medio de la dramática situación que se atraviesa en el interior del país por los efectos de la sequía. El miércoles la Bolsa de Cereales de Buenos Aires estimó que el impacto negativo de la sequía en la actual campaña agrícola, con relación a las proyecciones de septiembre, es equivalente a entre el 1,1% y el 1,8% del PBI. Además, se proyectan caídas de las exportaciones agroindustriales del orden de los 9.226 millones de dólares, y de hasta 14.115 millones en un contexto de mayor efecto de la ausencia de precipitaciones sobre el ciclo granario.
En este contexto, los dirigentes de AAPA agregaron: "Pedimos especialmente a aquellos políticos que dicen defender el campo y seguramente este año nos van a pedir el voto, que hagan algo y ayuden al sector mediante medidas de urgencia, entre las que se pueden incluir disposiciones legales que condonen deudas impositivas y ayuden a sobrellevar económicamente está triste situación".
Además, se señaló en el documento que "si no se hace algo urgente, la sequía nos dejará sin carne y leche, ya que el ganado no tendrá que comer. Y a eso hay que sumarle la falta de granos para criar pollos y cerdos. Hagan algo. Queremos soluciones urgentes. Dejen las vacaciones. Pónganse los pantalones largos y salven al sector agropecuario. No van a quedar alimentos para la mesa de los argentinos".